Sana, sabrosa y llenadora.
Hervir apenas, con poca agua, medio kilo de zapallitos de Bruselas.
Agregarle una cebolla mediana cortada en tiras muy finitas.
Mojar con dos o tres cucharadas de leche.
Mezclar bien con una cucharada colmada de maicena, sal y pimienta a gusto.
A una tartera apenas untada con aceite, forrar con la tapa de masa. Acomodar el relleno.
Cubrir con una capa de un zapallito redondo cortado en rodajas muy finas.
Volcar sobre el relleno tres huevos batidos, sal y pimienta al gusto.
Condimentar con un poco de orégano sobre el queso cremoso previamente acomodado en fetas.
Cerrar la tarta con la tapa y perforarle para que no se abra la masa.
Hornear a temperatura bastante caliente hasta que quede dorada la masa.
¡Buen provecho!
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