Los repollitos de Bruselas son una verdura amada u odiada. Preparada de este modo, todos los amarán. Se hacen rápido ¡y hasta los niños lo devoran!
Limpiar y lavar una bandejita (en Argentina pesan unos 500 gramos) de repollitos de Bruselas. Cortarlos al medio. Hervirlos en agua con apenas sal, cinco minutos bastan, deben quedar duritos aún. Escurrir bien.
Mientras, saltear en poquito de aceite de oliva un par de dientes de ajo fileteaditos. Reservar.
Cortar en daditos 150 gramos de jamón cocido.
Encender el horno al máximo. Untar con manteca una fuente de vidrio o de barro.
Mezclar 200 gramos de crema de leche con el ajo y su aceite, echar pimienta a gusto. Casi no necesita sal, pero es a gusto. Mezclar bien.
Distribuir un poco de esta crema en el fondo de la fuente.
Acomodar los repollitos y encima distribuir el jamón.
Volcar en los repollitos todo el resto de la crema de leche condimentada y cubrir con abundante queso reggianito rallado, que es el que aporta la sal. Colocarle encima algunos trocitos de manteca.
Gratinarlos en el horno al máximo. ¡Saborearlos calentitos!
¡Buen provecho!
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