Con sabor a niñez y a delicia de cosa hogareña y sencilla...
Ir precalentando el horno. Enmantecar y enharinar dos pizzeras. Colocar en un bol cincuenta gramos de manteca blanda y un huevo.
Agregar una taza tipo desayuno de azúcar. Hacer una pastita con todo esto. Si se desea, agregar unas gotas de vainilla. Yo no le puse, ni falta hace.
Agregar dos tazas tipo desayuno también de harina leudante (o harina con royal) e incorporar pequeños y escasos chorritos de leche hasta unir un poco la masa.
No amasar, sólo unir. Dejar descansar cinco minutos.
Estirar con la mano y distribuir pasas de uva sin semilla. Enrollar.
Cortar porciones y hacer los bollitos.
Acomodar en fuente enmantecada y enharinada dejando espacio entre sí, se agrandan al cocinar. Pintar con huevo batido.
Cortar la superficie en cruz con una tijera.
Espolvorear con azúcar. Hornear cinco minutos con calor fuerte y 25 minutos moderado. Dejar enfriar.
No se dejen engañar por su sencillez: se acaban antes de que se enfríe la fuente.
¡Buen provecho!
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